Este programa es mucho más que una simple iniciativa corporativa; es un puente hacia un futuro diferente para las comunidades donde operamos. En Aguas Nuevas, comprendemos que nuestra responsabilidad no termina en la provisión de servicios sanitarios. Reconocemos el papel esencial que jugamos al contribuir al bienestar social, y por ello, en 2023, decidimos poner en marcha un programa con un objetivo claro: generar oportunidades laborales para jóvenes en situación de vulnerabilidad social que forman parte del sistema de protección de Chile, ya sea por su participación en programas de justicia juvenil de SENAME o de protección de Mejor Niñez, aportando a su reinserción social.
La iniciativa nació con la firme convicción de que brindar una posibilidad laboral a estos jóvenes no solo les otorga un empleo, sino una segunda chance en la vida. Nos referimos a jóvenes que han crecido en entornos de violencia, delincuencia o que, por diversas circunstancias, se han visto arrastrados a transitar caminos que limitan su inclusión social a partir de los 18 años de edad. A través de esta iniciativa, les tendemos la mano, ayudándoles a reconstruir su autoestima, a descubrir su verdadero potencial y a crear un futuro laboral que antes parecía inalcanzable.
En Aguas Nuevas, creemos que la diversidad es un valor que enriquece nuestra organización. Al integrar a estos jóvenes, no solo les brindamos una nueva perspectiva; también fortalecemos nuestra cultura con sus experiencias y resiliencia. Con el apoyo de la Fundación Proyecto B, expertos en intermediación laboral y en intervención psicosocial, hemos diseñado un programa integral que acompaña a los jóvenes en cada paso de su proceso de inserción a la empresa. Desde la preparación laboral hasta el seguimiento continuo, nos aseguramos de que cada uno de ellos pueda superar los desafíos que enfrenta.
Hasta la fecha, hemos abierto 8 plazas laborales en 4 de nuestras empresas sanitarias, con un enfoque que no solo prioriza la inserción laboral, sino también el apoyo psicológico necesario para que estos jóvenes puedan desarrollar capacidades y habilidades psicosociales que les permitan avanzar en su bienestar e inclusión social. Cada uno de ellos ha encontrado en nuestro equipo no solo un espacio de trabajo, sino un entorno de contención, un lugar donde se sienten valorados y pueden construir un sentido de pertenencia.
Los resultados obtenidos son una prueba clara del impacto positivo de esta iniciativa, más allá del paso por nuestra empresa. Quienes integran nuestro programa están recuperando la confianza en sí mismos y han comenzado a escribir nuevas historias para sus vidas. Están aprendiendo a gestionar sus emociones, a tomar decisiones responsables, a insertarse y permanecer en el mundo laboral y, sobre todo, a creer nuevamente en un futuro mejor.
El reconocimiento que recibimos en 2024 de la Fundación Proyecto B (https://www.fundacionproyectob.cl), en la categoría ‘Compromiso’, es un testimonio de la dedicación y esfuerzo invertidos en esta iniciativa. Pero más allá de cualquier reconocimiento, el verdadero premio es ver cómo estas vidas han cambiado, cómo estos jóvenes ahora pueden soñar con un futuro que antes parecía imposible.
Resultados Cuantitativos:
A la fecha se mantienen 8 plazas laborales, de las cuáles se han cubierto 6. Se consideran los indicadores de éxito propuestos por la Fundación especializada en la temática con la que trabajamos y que focalizan en 2 tópicos:
– Permanencia de joven por más de 3 meses en la compañía: hito de cohorte que permite adquirir aprendizajes para la vida laboral y bienestar en general. Para el caso de nuestro programa, el 83 % de jóvenes cuenta con permanencia en la empresa mayor a 3 meses.
– Permanencia de jóvenes más de 1 año en la compañía: el 50% de los jóvenes lleva en su puesto de trabajo más de un año.