
Según el último Informe del Estado del Medio Ambiente de nuestro país, existe un incremento alarmante de basurales y de acumulación de residuos en sectores no autorizados, ocasionando graves problemas ambientales y sanitarios. Esta problemática es aún más crítica en zonas alejadas o extremas, en donde el acceso de la red de recolección y acopio de residuos es acotada. La chatarra es un residuo de difícil recolección para aquellos sectores alejados y con baja disponibilidad de recolectores de base, transformándose en un residuo que suele acumularse en grandes cantidades y por largo tiempo, al no contar con un flujo de salida sistemático.
La acumulación de grandes cantidades de chatarra en estos sectores provoca la alteración de los ecosistemas, muchos de ellos con un elevado valor ecológico, provocando además la merma de la actividad económica fuertemente orientada al turismo, y la pérdida de calidad de vida de sus habitantes, entre otros impactos específicos. Con la finalidad de responder a las necesidades de reciclaje de chatarra en localidades alejadas de nuestro país, Aceros AZA promueve un Programa de Economía Circular de la chatarra en zonas extremas, basado en campañas de recolección permanentes durante el año, en la colaboración con las comunidades beneficiadas, y en la alianza con empresas y organizaciones locales que comparten la misma visión, promoviendo con ello la implementación de un modelo de recuperación de recursos basado en los principios de la economía circular.
Durante cada intervención territorial, Aceros AZA realiza un proceso operacional basado en la habilitación de una prensa móvil capaz de compactar chatarra ferrosa de gran volumen, proveniente de fuentes domiciliarias, tales como: cocinas, refrigeradores, hornos, planchas de zinc y carrocerías de autos, entre otros. Luego traslada todo el material a diferentes centros de acopio distribuidos a lo largo del país para optimizar su distribución final hacia sus hornos de fundición en Planta Colina.
Una de las características más interesantes de este Programa es que la propia comunidad toma un rol clave para el cuidado y protección de su territorio. A través de sus líderes locales, levantan las necesidades, se organizan y buscan el apoyo de Aceros AZA como una solución participativa para enfrentar esta problemática. Es así como hemos podido reciclar la chatarra generada en zonas como la Antártica, el Archipiélago de Juan Fernández, Cochamó e Isla de Pascua.
Resultados Cuantitativos
En 2010 se retiraron 58 toneladas de chatarra generadas en Juan Fernández como consecuencia del tsunami y, dos años después se realizó una campaña de reciclaje con la Municipalidad del Archipiélago, en donde, con la ayuda de un buque de la Armada se retiraron 14,4 toneladas de chatarra. En el mismo año, con el apoyo de la Fuerza Aérea y la Armada, se retiraron 12 toneladas de chatarra desde la Villa las Estrellas en la Antártida. Esa chatarra se generó por el incendio del gimnasio y la obligación de nuestro país de retirar todos los desechos que allí se generan.
En paralelo, desde 2010, la iniciativa Limpiemos Rapa Nui ha permitido reciclar más de 270 toneladas de chatarra provenientes de la Isla, contribuyendo además a la educación ambiental de sus habitantes. Durante el 2021, el Programa se implementó en las localidades de Cochamó y Puerto Varas, beneficiando directamente a 150 familias, quienes colaboraron activamente en la recolección y acopio de 37 toneladas de chatarra.