La Achs en conjunto con los Servicios de Salud y las Corporaciones Municipales adherentes, quienes tienen bajo su responsabilidad legal Establecimientos de Atención Primaria de Salud, ha implementado desde hace 9 años un programa de atención temprana en salud mental, Unidad de Intervención en Crisis de la Asociación Chilena de Seguridad (UICACHS) en el marco de la ley 16744 y la Circular SUSESO 3696.
El objetivo es entregar estrategias preventivas y acompañamiento sicológico reactivo, oportuno y especializado ante cierto tipo de situaciones. Busca, además, prevenir accidentes del trabajo y enfermedades asociadas a la salud mental. Este apoyo emocional está disponible para personas y equipos que se vean enfrentados a violencias de diferente tipo, o que vivencien situaciones de alta
complejidad cuando estén en el cumplimiento de sus funciones.
Sí bien desde antes de la Pandemia de COVID19 el área salud estaba entre las tres actividades laborales con mayor afectación por violencia externa, con un alto impacto en accidentes laborales y enfermedades profesionales asociadas a Salud Mental, este número aumentó significativamente postpandemia.
En este contexto la Achs toma como eje de trabajo el redirigir las dos fases del programa de Intervención temprana en Salud Mental para lograr una mayor precisión en el diagnostico, la prevención e intervención reactiva en relación a la violencia a la que se ve expuestos los funcionarios de salud.
Para ello replantea las dos fases del programa UIC, tanto en su Fase Reactiva, como en la Fase Preventiva:
El objetivo de la unidad en la Fase Reactiva es entregar acompañamiento psicológico rápido, oportuno y especializado, que busca prevenir accidentes del trabajo y enfermedades profesionales asociadas a la Salud Mental ante la exposición de trabajadores de la salud ha hechos de violencia externa o situaciones de alta complejidad.
En la Fase Preventiva busca ser un socio estratégico generando medidas y programas de mitigación inmediata, a corto, mediano y largo plazo, cuyo objetivo es la prevención de accidentes de trabajo y enfermedades profesionales asociadas a salud mental.
Metas del programa desde la Fase Preventiva:
– Aumentar la denuncia de los funcionarios de servicios de salud y de Atención Primaria de salud para hacer visible el problema. La denuncia permite focalizar la implementación de medidas de mitigación y generar campañas preventivas.
– Desarrollar campañas de capacitación en la prevención de violencia que involucren a los funcionarios, así como a la comunidad.
– Impactar positivamente en la violencia externa a la que se ven expuestos los funcionarios de salud, meta a largo plazo a medir el 2024.
La Achs en conjunto con los adherentes de Salud, decidieron establecer un programa que apuntara a las metas descritas estableciendo un programa preventivo que permita “avanzar por trabajos sin violencia
para los funcionarios de Salud”, desde ahí se desarrolla un programa con 4 ejes:
1. Mesa de trabajo: Establecimiento de Salud designa un referente encargado del tema de agresiones:
– Se deben conformaron mesas de trabajo tanto a nivel central como a nivel local que están activas y en funcionamiento.
– Las mesas locales en conjunto con la UICACHS desarrollaron los protocolos de prevención y de actuación en caso de agresiones, así como también las capacitaciones que reciben y deben recibir los funcionarios en la prevención de violencia externa tipo I y tipo II.
2. Protocolos: Establecer protocolos los cuales deben ser conocidos por todos los colaboradores, se debe establecer que la violencia no debe ser normalizada.
3. Fase reactiva: En los protocolos, se debe establecer medidas de prevención, así como también en flujos de acción en caso de agresiones
4. Monitoreo: Es importante realizar el monitoreo a todas las agresiones de modo que se tenga visión permanente en el tiempo. La reportabilidad se debe ajustar a la situación actual de la institución e ir identificando puntos críticos de intervención.
Para complementar los 4 ejes se desarrolló una campaña cuyo foco por primera vez involucra a la comunidad en hacerse responsable de proteger al personal de salud de actos de violencia. Durante 9 meses se trabajó con establecimientos de salud desde Arica a Chiloé. El personal de salud diseño sus propios mensajes para entregar a sus usuarios a través de afiches, video cápsulas y chapitas, en que se
genera conciencia sobre la comunidad de la necesidad de que los pacientes, familiares y usuarios no participen de agresiones, ni realicen agresiones contra funcionarios de salud.
La campaña fue complementada por una malla de capacitaciones que buscan generar estrategias de prevención en salud mental:
• Manejo de usuario violento y paciente con estado alterado de conciencia
• Taller de regulación emocional y prevención de Bournout
• Taller de Mindfullness: ciclos de tres charlas de 35 minutos
• Espacios de autoayuda, resiliencia y regulación emocional (3 sesiones)
• Taller de estrategias de Primeros Auxilios Psicológicos Avanzado
Resultados Cuantitativos:
Aumento de un 57% de las denuncias por violencia externa, siendo la de mayor impacto las Comunas de la Granja con un incremento de un 300%, San Ramón 500% y La Florida con un 78%, todos los datos son en comparación a los reportes realizados durante el año 2022. Además, permitió visibilizar problemas en comunas en que años anteriores no se registraban agresiones como es el caso de Pirque, que durante el año 2022 no registro agresiones y durante este año han informado 9 reportes.
Entre enero y agosto del 2022 se reportó un total de 236 agresiones, mientras que este año 2023, para el mismo periodo se han registrado 371. Desde el lanzamiento de la campaña en abril del 2023, el reporte
de agresiones se duplicó. Esto ha impactado un aumento de solicitudes de programas de acompañamiento y prevención de la violencia en 800 colaboradores que pertenecen a Servicios de Salud y Atención Primaria de Salud con alta exposición a situaciones de violencia Tipo I y Tipo II, lo que disminuye la probabilidad de desarrollar patologías asociadas a Salud Mental, aumentando en un 50% la demanda en relación al año anterior.
Se realizaron 190 sesiones de coaching para líderes y jefaturas en “Liderazgo afectivo y afectivo en equipos con tensión sostenida”. Aumentando la demanda en un 65% a dos años anteriores
Se observa una mayor efectividad en la respuesta dentro de las primeras 24 horas, de contención psicológica a colaboradores enfrentados a violencia externa, aumentando durante marzo a junio en
un 40%.
Unos de los principales efectos de generar programas de mitigación en violencia es reducir la deserción del personal de salud de los sectores de mayor vulnerabilidad social y de este modo velar por la salud de la población en general.