La empresa química BASF está comprometida con el bienestar social y ambiental en las comunidades donde opera. En Quintero, donde se ubica su planta productiva, el humedal de Mantagua alberga más de 80 especies de flora y fauna y fue reconocido como Sitio Prioritario para la Conservación de la Biodiversidad. Sin embargo, la presión ambiental amenaza su equilibrio.
Frente a este escenario, BASF Chile, a través de su programa Conectar para Transformar y en alianza con Fundación Matter of Trust Chile, impulsó en 2024 la instalación de “Petropelo”: dispositivos elaborados con pelo humano y animal que absorben hidrocarburos y otros contaminantes en cuerpos de agua.
El proyecto Petropelo se desarrolló como una respuesta innovadora y colaborativa frente a la contaminación de ecosistemas acuáticos por aceites, grasas y materia orgánica. Su innovación radica en la validación científica del uso de pelo humano y animal reciclado como bioabsorbente natural, demostrando que un residuo abundante puede transformarse en un recurso de bajo costo, alta eficiencia y fácilmente replicable en otros contextos.
El proyecto combinó acción ambiental, participación y sensibilización comunitaria a través de un trabajo multisectorial, integrando a pescadores, peluqueros locales, vecinos, visitantes del humedal y colaboradores/as de BASF.
Durante la ejecución se instalaron 17 dispositivos Petropelo en puntos estratégicos del humedal. Estos dispositivos fueron sometidos a un proceso de monitoreo periódico en terreno, que incluyó mediciones y análisis posteriores realizados por Dictuc, lo que permitió comprobar su desempeño y garantizar la rigurosidad científica de los resultados. El seguimiento también involucró a la comunidad local, en particular a los pescadores, quienes participaron en las actividades de control, fortaleciendo la apropiación social de la iniciativa.
En paralelo, se realizaron cinco talleres de concientización y capacitación con objetivos específicos: dos en caletas locales para fortalecer capacidades en pescadores sobre el manejo de residuos y la importancia de la descontaminación del humedal; dos en plantas de BASF para sensibilizar a colaboradores/as en torno al rol de la innovación y la economía circular; y uno en Posada del Parque, con enfoque en biomímesis, que buscó vincular a la comunidad y visitantes con soluciones inspiradas en la naturaleza. En conjunto, estos talleres promovieron el aprendizaje colectivo y el trabajo en red, dejando instaladas competencias en diversos actores sociales.
La iniciativa se distinguió por su capacidad de movilizar actores diversos en torno a un mismo propósito ambiental, logrando articular esfuerzos del sector privado, organizaciones locales y la sociedad civil. De esta forma, no solo se aplicó una solución técnica de descontaminación, sino que también se impulsó un cambio cultural en el manejo de residuos, posicionando a la comunidad como protagonista de la solución. Petropelo constituye una metodología replicable y escalable, que combina ciencia, economía circular y trabajo territorial. Al transformar un desecho cotidiano en un insumo de alto valor ambiental, el proyecto demostró que la innovación puede surgir de recursos simples cuando existe articulación, participación activa y compromiso multisectorial.
Resultados Cuantitativos:
El proyecto alcanzó resultados concretos y de alto impacto. Se instalaron 17 dispositivos (6 sumergidos y 11 en superficie), monitoreados y validados científicamente, que removieron 26,16 kg de aceites, grasas y materia orgánica. Actualmente, quienes cuidan el humedal están asumiendo un rol activo en la búsqueda de soluciones para limpiar este ecosistema, como monitoreo continuo, fortalecimiento normativo y remoción de aceites y grasas.
La comunidad fue protagonista: 1.500 peluqueros donaron pelo y 80 pescadores participaron en la confección e instalación de los dispositivos, lo que fortaleció su rol como agentes de cambio y generó un empoderamiento local basado en corresponsabilidad. Asimismo, 100 colaboradores/as de BASF se sumaron a talleres de concientización, potenciando la cultura ambiental interna. En sensibilización, más de 2.000 visitantes del humedal recibieron información directa, ampliando la conciencia ambiental.
Información complementaria: